lunes, 13 de julio de 2009

SOLEDADES EN MI COMPAÑÍA

Últimamente estoy disfrutando de la soledad y no es porque esté solo, sino más bien porque he hallado una especie de “fórmula” para abstraerme de lo que me rodea que incide en mis escritos de una manera muy clara. Mi mujer y mis amigos me comentan que mis creaciones son raras y muy intimistas. Quizás.
Decidido ya que soy un desastre como escritor, poeta o cualquier cosa relacionada con el gremio, me dedico a escribir con más ganas, pero sobre todo me dedico a escribir única y exclusivamente para mí.
Este poema es otro delirio, otra pincelada de misterio que brota desde mi interior para hablarme, para seducirme o quién sabe si para atormentarme. Yo mismo.

Todo fue viento mientras duró la calma.

Del pecho prendidas, tres flores;
Una roja, por la sangre
Otra amarilla, no sé por qué,
La otra blanca, por tu alma.

El poeta escribió mi destino en la orilla de la mar
Y en torno a la espuma oceánica forjó los deseos,
Un deseo para encontrarte,
Un deseo para no hallarte
Y un deseo de hastío prolongado en la no búsqueda.
Si hubo más deseos lo desconozco.

El poeta y mi mano en conciliábulo se hallan
Y no hallan palabras que concilien lo eterno.

La noche se prolonga, pero solo hasta la mañana,
Luego, más hastío.

Del pecho prendidas, ya lo sé, tres flores,
Roja, amarilla y blanca,
Sangre, alma y…

Todo fue viento mientras duró la calma.

Mareaxe.

4 comentarios:

  1. Entiendo perfectamente que de vez en cuando necesitemos esos momentos íntimos.

    Un precioso poema, felicidades.

    Saludos ;)

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  2. Buen poema y la soledad a veces es muy necesaria.

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  3. La soledad da perspectiva, si no es obligada, claro está.

    Biquiños rapaz!!!

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  4. La soledad es imprescindible para la creación. Una soledad física, o espiritual (no necesariamente unidas)

    No entiendo la creación; es más, no entiendo la vida creativa o meditativa verdadera, sin soledad. El artista integrado y popular es una utopía. Algunos lo consiguen, pero por circunstancias que; en la mayoría de los casos, no dependen de ellos.

    Y en la historia, a nivel sociologico, se da el siguiente fenomeno: cuanto más se promueve el individualismo, la guerra y la lejanía, mas fuertes se hacen los lazos entre las gentes. Y, cuando con más empeño se promueve la colectividad y el hermanamiento (vemos esto hoy en día) más vacío se queda el hombre.

    Del uno sale todo. En la soledad nos vemos con plenitud. Y de la soledad y sus sombras, también brota la autentica amistad.

    Todos somos solos. Todos somos uno. Y no hay nada seguro, ni siquiera nosotros mismos.

    Que suerte, por cierto, que tengas una mujer tan crítica con tus escritos.

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